miércoles, 4 de diciembre de 2013

Clotilde, la ecónoma, sigue pensando...

Para todos los que nos quieren y se preocupan por nuestra economía:

Ayer saque los retazos de canciones, acaba de salir el sol y un haz de luz entró a la casita que estamos queriendo: -no es tan oscura Carmen, nosotros la llenamos de luz…
La plata es lo de menos, me la pasé la vida ahorrando, bueno, desde la adolescencia, una vez casi lo dejé todo pero no me duró mucho.
Esa plata estaba guardada para alguna ocación especial… hice algunos viajes, tuve algunos trabajos, creció y decreció, cuando la cifra fue considerable puse mi dinero en el banco y me estafó… Lo recupere rápidamente trabajando, me independicé, compramos un autito, pagué alquileres, facturas, seguros, obras sociales, algunos viajes más cortos pero no dejar de viajar… el auto pasó a una camioneta con ayuda “gracial”, mejoramos nuestra vida o eso que llaman “calidad” hasta que in día invertimos todo por la libertad.

¡Que comience con un viaje!
¿a dónde?
A cualquier lugar!
Conozcamos ese mundo al que queremos cambiar.
Para notar la evolución, tenemos que evolucionar!

Y aquí estamos en Europa, sin autito o camioneta, sin un seguro social, llenos de experiencias que el dinero no sabe pagar.
Volveremos con historias, con semillas que contar, las sembraremos de a poco, las veremos germinar, comeremos de sus frutos sin dinero que cambiar.

Pasaporte sellado, del avión paso al caballo, miles de kilómetros o unos metros cuadrados, cuando es el alma que se expande no hay “transporte adecuado”.
Me está saliendo con rima, se está volviendo canción, no son mas que matutinas que salen a borbotón.


Clotilde, la ecónoma, sigue pensando…


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